EL RING | |
El Ring resulta de la puesta en vídeo del espectáculo escénico e intermedia, con el mismo nombre, celebrado en el Mercat de les Flors (Barcelona 1988). En este trabajo, indispensable para comprender la historia del vídeo en España, Julián Álvarez desarrolla el concepto de combate pugilístico como dualidad excepcional. A la danza, puesta en escena y música se les une la captura y emisión de las luchas y pausas desde diferentes puntos de vista en circuito cerrado. Por otro lado se insertan en la acción tanto documentos fílmicos de pugilatos históricos, como reflexiones de una mujer apasionada por este deporte mientras masajea un cuerpo de color. Una exploración sobre la dualidad, la erótica de la violencia y las tecnologías de visión, su manipulación y recepción. El Ring se construye a través de la estructura de un combate de boxeo. Al ritmo de los movimientos, golpes y cambios de los dos performers púgiles se van insertando flahes de combates históricos y reflexiones de una mujer mientras masajea a un boxeador negro. Julián Álvarez investiga las posibilidades de representación escénica del arte del boxeo concentrándolo en un vídeo monocanal. Una investigación que parte de sus experimentos en torno a la descomposición e hibridación de los medios y modelos del lenguaje audiovisual institucionalizado. Alegorizando en un cuadrilátero, donde las únicas opciones son o KO u OK, una dialéctica que se expande hacia la implicación de otro tipo de dualidades (tipo Yin-yang, contendientes en rojo y negro, masajista blanca y masajeado negro, etc.) en el combate entre opuestos semejantes. Ambigüedad ideológica donde la rivalidad no significa hostilidad, sino que una explica la otra, una pelea con reglas. Reflexión abierta sobre la violencia como deporte, donde la tecnología de observación es utilizada como un sistema narcisista de lucha. Al tiempo que la pelea-danza entre los boxeadores se muestra a través de distintos ángulos, se aprecia en los monitores de las esquinas del ring las imágenes que producen dos cámaras mínimas adosadas al puño derecho de éstos. Prótesis, o extensiones, que captan al contendiente desde la mirada del otro y a sí mismo como espejo. Un recurso tecnológico y plástico que introduce al espectador en el golpe, en el acto desde el actante. «Imágenes producidas por el cuerpo en trance de relacionarse con esa realidad.» La fragmentación de estas tres narraciones paralelas (el pugilato, las imágenes de archivo de boxeo, y el masaje) confluyen en la linealidad videográfica a modo de estudio del propio medio. La mutación de la frase de Marshall McLuhan, “el medio es el mensaje”, en el título de su libro “El medio es el masaje” parece delimitar la dialéctica interna de este vídeo. Un medio, la minicámara en los puños de los contendientes, como mensaje de lucha viril, al tiempo que, el mismo vídeo, muestra un masaje donde se relata la pasión femenina por este deporte, ambos arropados por un contexto de documento histórico. Ya que, como dice Barthes, lo que el público reclama es la imagen de la pasión no la pasión misma. Contenidos relacionados en: www.idep.es/juliansite: Ver en: >video-filmografía>por itinerarios>Cámara-a-mano Ver en: >video-filmografía>por itinerarios>Boxiana Ver en: >video-filmografía>monográficos>El cámara-performer Ver en: >video-filmografía>monográficos>Perdido en la frontera... Ver en: >artículos>del autor>Viaje intermitente a través de ... Ver en: >artículos>sobre el autor>La metáfora y la muerte (J.M.Català) Ver en: >artículos>sobre el autor>Figura con paisaje (J.M.Català) Equipo Eventos relacionados
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