Del URINARIO “DUCHAMP” al TIBURÓN “HIRST”
La vida es arte y el arte es vida

Con este eslogan, “La vida es arte, y el arte es vida”, el movimiento Fluxus (1960) otorgó carta de naturaleza al arte conceptual, el arte de las ideas. Buena parte del arte contemporánero que hoy se expone deriva del aquel gesto transgresor: un urinario (1917),  firmado (M. Duchamp), expuesto en una galería de arte.

Del urinario de Marcel Duchamp (“Fontaine”, 1917), al tiburón disecado de 12 millones $ de Damien Hirst (“La imposibilidad física de la muerte en la mente de alguien vivo”, 2005),  pasando por Piero Manzoni (“Mierda de artista”, 1961). Recorrido analítico, irónico-crítico por la historia del arte conceptual más radical,  y concretamente por sus expresiones artísticas más extravagantes.

DEL CONTÁINER A LA GALERÍA DE ARTE
El reciclaje artístico

Objetos viejos, ya en desuso, por viejos o por anticuados, son abandonados diariamente en los contáiner de la ciudad para ser recogidos por las brigadas de limpieza. Pero antes de que sean retirados, otras personas se adelantan y se apropian de algunos de estos objetos para someterlos a un reciclaje artístico. Objetos que posteriormente pondrán a la venta a precios de piezas únicas y exclusivas. Objetos que adquiridos nuevamente en establecimientos de arte y diseño pueden quizás volver irónicamente a las manos de sus antiguos dueños, adquiridos a precios también exclusivos.

ESCENAS INOLVIDABLES. LA PELÍCULA DE TU VIDA

Jóvenes y adultos, mujeres y hombres, guardan en su memoria cinematográfica una “escena inolvidable”.

El rostro en primer plano de una persona mirando a cámara anuncia el título de la película cuyas “escena inolvidable” contará a cámara. El encuadre se mantiene fijo mientras en background (chroma-key) vemos la secuencia que está describiendo. El programa, en forma de cápsula de 2-3 min., confronta una y otra realidad, la icónica (secuencia de la película) y la verbal (personaje hablando a cámara), resaltando las divergencias.